Bueno hermanos de leche:
Luego de leer experiencias de compañeros de armas (especialmente del Amigo Invisible) me comuniqué ayer con la citada en el Título.
No puedo sumar nada nuevo a lo muy bien descripto por el Amigo Invisible. Esta publicación sirve al solo efecto de ratificar lo ya conocido.
El lugar es discreto, parece un consultorio que funcionó hasta fecha reciente, peus tiene sala de estar y cartelitos en cada puerta indicando especialidades como Kinesiologìa o cosmiatría. Débora es una mujer encantadora, sumamente simpática y buena onda constante.
Me entregó toalla y bata impecables, y me llevó hasta el baño. Este es muy pulcro, con jabón líquido y duchador de mano (mas cómodo que usar el bidet). No ví lugar para una ducha completa ni pregunté. Pero no es necesario, pues utiliza talco en medida justa, que con los masajes termina desapareciendo sin dejar rastro ni olor.
La camilla tiene sábana descartable, y la sala está acondicionada lumínicamente para crear un ambiente muy calmo. La musica es ambiental y muy suave.
Quien busca masajes fuertes o terapeuticos, abstenerse, o preguntar antes de pedir el servicio si los realiza. Sus masajes son caricias solamente.
Para destacar: Luego de trabajar sobre toda la espalda, comienza la tarea "Caliente" subiendose a la camilla (muy cómoda) y pasándo la punta de su lengua por toda la espalda y muslos. Finaliza también pasando la lengua por la cola (no por el ano), lo que hizo despertar al amigo. Parelelamente refriega sus pechos (hechos) lo que me exito en buena forma.
Me hizo dar vuelta y empezó un suave lengueteo de bolis que terminó de ponerme a full.
Capucha y pete suaves pero ritmicos, y muy despacio se desliz´` hacia arriba hasta que el pelado entró (con suma facilidad) por la chochi. Inició movimientos suaves. Luego de un rato cambiamos de posición, ella boca abajo totalmente acostada (no en cuatro) y yo encima metiendo suave matraca hasta acabar.
Me hizo acostar nuevamente y en forma delicada retiró la gomita llena (muy delicado todo).
Terminó masajeandome la cabeza y dirigiendo mi respiración hasta terminar la sesión. Entré a las 14.01 y me levanté de la camilla a las 14.55. Me pude higienizar y cambiar tranquilo (sin apuros) y a casa livianito.
En resúmen: como dije antes, los masajes son caricias y el garching es suavecito, todo acorde con el clima que ella crea desde un principio. Quienes busquen a una guerrera, no es este el caso, quienes busquen masajes fuertes, tampoco.
Fue una Buena experiencia. Muy buena relación precio/calidad.
Reincidencia: Es una buena opción a tener en cuenta de vez en cuando para mí, aunque no reincido normalmente.
Espero que les sirva. Salute!!!!!!!!!!!!!!