Luego de bastante tiempo sin ir a este lugar, y confirmar que todavía existe, decido darme una vuelta, ahi en Fitz Roy y Muñecas.
Al recibirme, me entrega una bata y paso a la ducha.
No doy detalles del jacuzzi o el sauna, porque no suelo hacer uso, en el recibidor desfilan 5 srtas, aquí me encuentro una cara familiar, Paola. Conociendo ya sus masajes, opté por ella.
Pasamos al gabinete, y luego de una charla, comienza con unos buenos masajes.
Nuevamente, sus masajes no me defraudan, y quedo más que satisfecho. Vuelta de rigor, y siguen los masajes boca arriba, hasta que luego de un rato comienza a juguetear con el amigo.
Charla de negocios de por medio, arreglamos participación por $500. Empieza con un excelente bucal sin, luego calza pilotín y se sube arriba, comienza una linda cabalgada hasta que libero los muchachos.
En total, fueron $850, incluido el arancel de ingreso. Definitivamente es seguro que vuelva más seguido.
