Después de bastante tiempo, volví a lo de Barby (no conocía la remodelación), me gustaba mas antes, cuando había mas discreción y catrera.
Igual debo reconocer que la atención de Vero y Ana, sigue tan buena como siempre (por lo menos en cuanto a amabilidad y simpatía).
Pedí pasar con la peruanita Melody y me gustó mucho (tetamaníacos abstenerse). Es chiquita, pero muy bien proporcionada, tetitas chicas, pero naturales (cosa que suma mucho), muy buena onda y bien predispuesta.
Encima, hace buenos masajes. El pete fue sin (no se si hasta el final).
Acepta varias posiciones y se hizo lo que se puede en la camilla, si bien es amplia, no ofrece la comodidad de una cama.
Ahora para ir a ducharse, primero espían que no haya nadie por allí, luego dan el visto bueno para ir, también cuando uno se va.
Melody me gustó su onda y reincidiría con ella.
Cuando me fuí dejé $ 700, no me dijeron ni tampoco sabía del cambio de arancel.
Bohemio