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Dayana (amiga de Dulce Amaral)

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Profe tumbero

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Estimados foristas:

La experiencia que narraré a continuación es de fines de año. Es decir, de más de un mes aproximadamente.

A la señorita la tenía vista desde hace ya bastante tiempo, debido a que me la crucé en múltiples oportunidades por la calle Córdoba en el rango de cuadras que van de la nueve de julio a Florida. La primera vez que la ví iba acompañada de otra señorita, muy hermosas las dos (pero en particular la acompañante) y me pareció que ambas eran brasileras. En cierta ocasión tuve la oportunidad de entablar diálogo con la acompañante, también por la calle y me dijo que se llamaba Lucía (creo) y que a la postre me di cuenta que publica como Dulce Amaral. No tuve la posibilidad de pasar con ella -ya sea por falta de tiempo o de guita; pero sin duda es muy simpática.

La niña con la cual pasé, o sea la amiga de Dulce Amaral, se llama Dayana y también es Dominicana. Es más baja que Dulce Amaral y de tez más oscura y con rasgos negroides un poco más marcados. También es muy bonita, aunque para mi Dulce Amaral es más atractiva. Me comentó que estuvo posteando, pero que ahora no lo hacía más y que pensaba alquilar algún departamento para trabajar.

En dicha ocasión, se alinearon los astros, tenía algunos billetes para invertir en mí y la encontré sola –en varias ocasiones iba con algún colega –. Al pasar le dije algún piropo, nada del otro mundo, dado de que la intención no era generar un intento de levante sino la de comenzar un diálogo, lo que logré. La muchacha arrancó con 400 pesos y, dado de que era fin de mes (fines de noviembre) le manifesté que no me alcanzaba y logramos la rebaja a 300 pesos. Y, para aquellos que dicen que yo no sé nada de gatear (algunos imbéciles y/o 840 disfrazados de foristas que sangran por la herida de que se les cayó la renta que les genera su pupila debido a mis experiencias publicadas) comencé a que explique en qué consistían su servicio por ese dinero. Esto es indispensable con todas, pero más que nada con las dominicanas, a fin de evitarse un disgusto adentro del telo y que comience a pedirle más dinero por cada cosa que uno quiere. Debo decir, que la mina me respondió de manera inteligente, pero con una frase hecha: “mi interés es que la pases bien para que vuelvas”. No obstante, insistí a fin de aclarar los alcances del arreglo. Una vez llegado a un acuerdo enfilamos para el hotel de Tres Sargentos. Y, mientras íbamos con ese rumbo, a propósito me retrasé unos pasos para mirar la mercadería desde el plano dorsal (mirarla de atrás) y, debo reconocer que me gustó bastante.

Al llegar, lo obvio: pedir el cuarto y pedir la consumición sin cargo que está contemplada en ese telo y, que el conserje no dice jamás palabra alguna, por razones más que evidentes. Incluso Dayana lo ignoraba y se mostró sorprendida. Pedimos dos gaseosas cola y subimos. Al llegar al piso, que era el primero motivo por el cual la longitud del viaje no dio para hacer mucha aproximación previa, ocurrió algo llamativo: comenzaron a escucharse gritos de hombre, pero no debidos a la consumación del coito. Al descender del ascensor, mientras cerraba la puerta me topo con Sofía, de la cual pueden ver una XP mía y la de otros foristas que hablan pestes de esta mujer (con la única excepción de un forista impresentable que se declara –entre otras virtudes de mentiroso). Y de fondo se escuchaba los gritos de un tipo que decía “guacha de M.” , “hija de puta” "la concha de tu madre" y "la P. que te parió". La mina (me refiero a la tal Sofía) enfurecida tuvo que abrir las puertas, porque debo reconocer, recordando mi Xp con ella y dándome cuenta de lo que acababa de acontecer, le cerré la puerta del ascensor en la cara. De poco caballero quizá; pero ante tal señora, tal honor se le dispensa.

Una vez ingresado en el cuarto lo primero fue darle el dinero a Dayana, sin que ella me lo pida. Y procedí a bañarme, mientras ella –vestida aún, me contemplaba desde la puerta del baño y hablamos de la tal Sofía. Ahora bien, sabrán disculparme pero no voy a dar datos por temor a que alguien vaya con el cuento y esta Sofía la increpe a la mina esta. Luego de la ducha, salí del cuarto y la señorita comenzó a desvestirse. La vista desde atrás era más que estimulante, y ahí sí de manera caballerosa se la elogié. La señorita se sonrió, agradeció y, soltó la frase: “lástima las tetas que las tengo feas” y comenzó a girar –para mirarme de frente- en sentido contrario a las agujas del reloj, mientras que yo avanzaba en sentido horario y, al estar de frente me topé con dos pasas de uvas. Dos pasas de uvas no tanto por el color, sino por la forma y la textura. Bueno, estimados, ahí uno debe tomar la sabia decisión de tratar de evitar pensar en eso, porque sino todo termina en una mala XP. Entonces, hacer como cuando uno está obligado a comer un plato, que posee un ingrediente que no le guste: dejarlo de lado y comer el resto. ¿Qué se le va a hacer?. La señorita me comentó que el estado de sus glándulas mamarias se debe al amamantamiento de sus cuatro críos.

La señorita comenzó con un PT sin, nada del otro mundo, para encapuchar enseguida. La mina me había dicho que cuando comenzará a despedir líquido, encapucha. A veces, una vez encapuchado, la mina le pone más garra; este no fue el caso, la situación no mejoró de manera significativa. Estuvimos franeleando (esto denota mi edad) y la mina quería enseguida que se la ponga. Estrategia para hacerte acabar rápido y mandarte a casa. Lo que no tuvo en cuenta de que yo soy de tiro largo y la hice laburar de manera. Por un lado en la previa y luego en la faena que, debo decir que mejoró sensiblemente. Variamos en varias posiciones: ella arriba mío mirándome la cara, arriba mirando mis pies, misionero, en cuatro y, para terminar yo sobre ella con mi pecho sobre su espalda. A pesar del aire acondicionado, los dos terminamos empapados y tanto ella como yo tuvimos que bañarnos. La charla, dentro de todo bastante simpática. Surgió la posibilidad de hacer un trío con Dulce Amaral. Tomamos las gaseosas y nos fuimos. Ella no me dio su teléfono y quería el mío, con el cual luego me mandaría un mensaje para que pueda agendar su teléfono. Estuve a punto de dárselo, pero en el momento de estar por dictárselo vi que en su celular tenía la foto de un tipo (y ella me dijo que ese celular se lo habían prestado porque el de ella se lo habían robado). Le dije que dejara, que en todo caso la llamaba a la amiga y le explicaba la cuestión y que ella me lo pasara.

 

Tablita;

Cara: Digamos 8. Es linda.

Tetas: ¿Puedo calificarla con números negativos?.

Culo: 9. Creo que no entrega.

Cuerpo en general: vestida está muy bien.

Simpatía: 9.

Garching. 7 u 8.

Reincidencia: No lo creo.

 

Si falta algo o alguna duda, no duden (valga la redundancia) en consultarme.

Fuerte abrazo.

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Re: Dayana (amiga de Dulce Amaral)

 

Supongo que hablamos de esta señorita.

 

 

http://dulceamaral.blogspot.com.ar/2013/07/dulce-amaral.html

 

 

Felicitaciones por la experiencia

 

Efectivamente colega, es la amiga de la señorita con la que estuve. Aunque debo reconocer que esta experiencia debería ir en la parte de callejeras.

Fuerte abrazo

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